En Honduras el aborto es penalizado en todas sus formas, es decir, que según la ley no se puede interrumpir un embarazo aún cuando éste lleve a la muerte de la mujer.

Una mujer que queda embarazada sin desearlo puede verse obligada a recurrir a un aborto en condiciones clandestinas e inseguras que pueden perjudicar su salud y hasta su vida. Esta penalización hace delincuentes a las mujeres y tiene efectos psicológicos físicos sobre ellas en una situación que ya de por sí es difícil.

Campana 20 de septiembre – Dia por la despenalizacion del aborto en America Latina y El Caribe